Diccionario de la A a la Z

Conejo:

Todavía hay quien se resiste a consumir conejo. Muchas veces por desconocimiento de cómo prepararlo e incluso hay quien ni lo ha probado. También su aspecto de peluche cuando están vivos, hace que se sienta reparos a su consumo. El conejo de monte es privilegio de unos cuantos cazadores y ellos ya saben como desollarlos (quitar la piel) y orearlo antes de cocinarlo. Para quien lo va a comprar hay que avisar que en la mayoría de los casos, son de granja. Entre otras cosas esto supone que cuando se adquiere ya se puede cocinar. Su peso oscilará entre un kilo 300 gramos hasta casi dos. Los de monte son más pequeños. Su carne es tierna aporta muchas proteínas, apenas grasa y cantidades muy importantes de calcio y fósforo además de vitamina B1. Su carne deberá presentar un aspecto rosado fuerte y brillante y sobre todo hay que fijarse mucho en las vísceras. El hígado, que se aprovecha para la salsa, estará muy rojo y brillante. Se puede preparar escabechado, en salsa con su hígado, con arroz, con caracoles, con tomate y pimientos, terrinas par degustar como fiambre o incluso preparar patés. Es una alternativa más ya que el año dura 365 días y hay que variar los menús.