- Pela los plátanos machos.
- Córtalos en rodajitas de un centímetro de grosor.
- Sazónalos con sal y las dos clases de pimientas.
- Prepara papel absorbente de cocina doble sobre una superficie rígida.
- Vierte 200 ml. de aceite en una sartén amplia y calienta a fuego medio.
- Fríe rodajitas de plátano por ambos lados pero sin que lleguen a dorarse mucho. Calcula un minuto y medio por cada lado.
- Coloca las rodajitas fritas extendidas sobre el papel absorbente de cocina.
- Cúbrelas con papel absorbente de cocina doble las rodajitas que has frito y con un martillo de madera aplasta las rodajitas hasta que queden muy finitas.
- Vuelve freírlas hasta que queden doraditas por ambos lados y cuando las saques las pones sobre papel absorbente de cocina para que escurran el aceite sobrante.
- Pásalas a una fuente y salpica con un poquito más de sal.
- Haz lo mismo con el resto de rodajitas de plátano. Recuerda que el proceso es primera fritura, aplastamiento de las rodajitas fritas y segunda y última fritura.
Están muy buenas recién hechas.